Hoy quiero contaros sobre mí y de porqué estoy aquí.
Y estoy aquí simplemente porque el Tantra transformó mi vida!
… y lo hizo en muy corto tiempo. Además lo más sorprendente y maravilloso para mí, es que sucedió de una forma muy celebrativa, amorosa, llena de juego y de disfrute! Lo cual rompió con todos los esquemas e ideas de que todo tenía que conseguirlo con esfuerzo, con un gran coste y con sufrimiento.
Mi motivación inicial era poder sentirme más segura como mujer y encontrar formas de conectar de forma más íntima. Cuando me acerqué al tantra por primera vez, yo me sentía muy insegura como mujer. Entre otras cosas, tenía mucha inseguridad y vergüenza sobre mi cuerpo, me costaba conectar e intimar, sobretodo con el sexo opuesto. Me di cuenta que mi cabeza estaba llena de ideas rígidas exigentes de cómo tenía que ser yo y cómo tenían que ser lo demás para poder conectar y claro, nunca se daban todas estas condiciones, principalmente porque ya para empezar yo no cumplía los requisitos de mi mente de cómo tenía que ser…
Y el tantra me ayudó muchísimo con todo esto, pero lo que no esperaba es que el tantra era mucho más que eso y que me iba a abrir las puertas a algo mucho más grande, a una realidad mucho más grande y amorosa!
El tantra me hizo soltar las ideas y me abrió el corazón: no sólo a los demás, sino principalmente a mí misma! Fue una verdadera revolución. Descubrí que era posible meditar, conocerme a mí misma, aceptarme, conectar, transformar lo que ya no me servía y vivirme desde la celebración y del gozo, bajar la auto-exigencia, que no era necesario sufrir y auto-castigarme!
Ya en mi segundo taller de Tantra, viví lo que yo llamo un despertar, que lo cambió todo. Pude experimentarme, por primera vez, como algo mucho más grande de como me había conocido hasta entonces, mucho más grande que este cuerpo y sus límites. Me experimenté como Amor, me experimenté en Amor. Supe con una claridad que jamás había tenido antes, que la razón por la que estaba aquí en esta vida era para que el amor pudiera seguir fluyendo y de pronto todo tenía sentido.
Y aquí quiero hacer un paréntesis para contar, que todo esto era antes impensable para mí y para la vida que había llevado hasta entonces.
Yo era una mujer profesional ambiciosa.
– Había estudiado ingeniería industrial superior, había hecho un master en París y un doctorado, y seguí coleccionando títulos de gestión de empresas en Inglaterra…
– Trabajé en 4 países y sectores distintos: desde la consultoría, ingeniería, el desarrollo de tecnología, el medio ambiente, el mercado de las energías….
– Viví en Inglaterra casi 11 años y había evolucionado exitosamente en un mundo corporativo muy masculino, por lo que me sentía muy orgullosa (en esa época rechazaba el femenino en mí, sentía que era el sexo débil y yo no estaba dispuesta a ser débil). De alguna forma había demostrado que era una de ellos!
Sin embargo, cuando paré de coleccionar títulos, bajé un poquito el ritmo y me dí un poco más de espacio para mí, para realmente sentir mi corazón, me di cuenta de que no estaba satisfecha en este mundo. Era cómodo, pero no me llenaba en absoluto, al contrario me decepcionaba a menudo y no estaba en harmonía con lo que mi corazón sentía.
La dificultad es que no sabía cómo salir de ahí y de la vida que había creado para mí.
Probé de todo, buscando una salida, pero nada arraigaba en mí, hasta que el tantra llegó a mi vida!
La experiencia de despertar, me dio la fuerza y la claridad para soltar todo aquello que ya no era verdad en mí, todo lo que no me servía y que no estaba alineado con mi corazón. De esta forma, dejé un trabajo reconocido y exitoso en el mundo corporativo, un novio y casi todas mis pertenencias, hasta quedarme con una maleta que se convirtió en mi hogar durante unos años…
Y así inicié un viaje de exploración personal, exterior e interior. Llevé una vida nómada durante 8 años, lo que me permitió conocer distintas formas de vida, en comunidades conscientes y fuera de ellas, en la naturaleza y en ciudades, en culturas muy distintas. Me permitió experimentarme y conocerme en facetas de mí que no había explorado. Quise saber por mi misma, a través de mi propia experiencia, que es lo que era verdad y bueno para mí y que es lo que no lo era; solté así prejuicios y los reemplacé por un conocimiento directo, que a veces confirmó lo que me habían enseñado y en otras ocasiones lo derrumbó.
Viajé, experimenté y aprendí de cada experiencia, hice muchos talleres, retiros de silencio (en grupos y también sola por mi cuenta) y también de la vida “ordinaria”. Tuve muchos maestros y maestras, de índoles muy diversas, los que se lo llaman así mismo maestros y los que no (Osho, compañer@s de aventuras, la naturaleza, el silencio, los procesos, el carnaval, la medicina, el cuerpo, Anamika, los amantes, Dolano!!!, Unmani, Cesar Teruel, Mooji,… Los Bauls!, Astiko,…).
Este caminar me llevó lejos (geográficamente), y al mismo tiempo me llevó a lo más cercano, a lo que siempre había estado buscando…
Me llevó a lo más íntimo de mí, a lo que siempre había estado y siempre está, a lo único que puedo dar por contado, pero de lo que antes no era consciente.
Me llevó de vuelta a casa: a la esencia de quien soy, esa parte de mí donde puedo descansar en cualquier momento.
Me llevó a conocer mi naturaleza más verdadera, esa parte de mí que ya está bien, feliz, completa y en paz.
Me cambió la perspectiva de la vida y, aunque nada cambió fuera, eso lo cambió todo!!!
(Gracias Dolano por guiarme a este darme cuenta de mi misma y gracias a los maestros posteriores por no permitirme hacer de todo esto un concepto!!)
Así que no es sorpresa, que hoy quiera compartir sobre el tantra, cuyos beneficios he conocido también en mi propia experiencia de vida!
Mi pasión y mi gran motivación a la hora de compartir el tantra es ofrecer una oportunidad para que cada persona pueda, a su propia manera:
– Tener una experiencia directa de su ser más esencial y que pueda, de forma consciente, reconocer su naturaleza verdadera, para así volver a casa!
– Soltar todo condicionamiento que nos separa de poder vivirnos desde esta naturaleza
– Vivir la vida desde el gozo, la gratitud y la celebración
¿Y por qué tantra para sólo para mujeres?
Yo me inicié en el tantra en grupos mixtos de hombres y mujeres. Pero ya en los primeros talleres, nos separábamos solas las mujeres y me daba cuenta con sorpresa de lo confrontador y al mismo tiempo lo beneficioso que era compartir de forma consciente solo con mujeres. Me di cuenta de la gran necesidad que tenía de sanar mi relación con el femenino, con las otras mujeres, para así poder pasar de la comparación, la competición, los celos, el miedo y el cotilleo que tanto daño y separación han causado en nosotras (fuera, dentro y en el mundo en general) a apoyarnos, a amar, a brillar y a traer el femenino al mundo que tanta falta hace. A través de sanar mi relación con las otras mujeres, pude empezar a sanar la relación conmigo misma. Ellas me permitieron poder verme, aceptarme, apreciar mi propia belleza y mi poder.
Tuve un deseo, un sueño: el poder compartir algún día este trabajo con mis hermanas y especialmente las mujeres de mi tierra (que crecieron con el mismo condicionamiento).
Hoy TANTRA WOMAN (y especialmente en España) me ofrece la oportunidad de satisfacer este sueño de una forma más poderosa y bella que la que podría haber soñado y acompañada de Santoshi y de un equipo de mujeres-amigas maravilloso!
Siento que Tantra Woman es la parte alta de un río que se dirige al océano de un mundo en el que el femenino vuelve a ocupar su lugar, sano, amoroso, bello, radiante, poderoso, donde no hay separación para que así juntas y juntos, podamos crear el mundo más bello que nuestros corazones sabe que es posible!!!